Detalle de lo tratado
Introducción
Importancia de conocer nuestras virtudes
La sabiduría
Poniendo en práctica mis virtudes
Conclusión
INTRODUCCIÓN
Las virtudes del carácter son las partes positivas de nuestra personalidad, las que afectan nuestra forma de pensar, sentir y comportarnos. Cuando conocemos los mejores rasgos de nuestro carácter, podemos mejorar nuestra vida. Las investigaciones muestran que el usar las virtudes de nuestro carácter puede ayudarnos a:
* Mejorar nuestras relaciones, nuestra salud y bienestar general
* Protegernos y ayudarnos a superar los problemas
* Estimular nuestra confianza
* Aumentar nuestra felicidad
* Reducir el estrés
* Mejorar nuestro desempeño laboral
* Ayudarnos a alcanzar nuestras metas
* Tener significado y propósito
LA SABIDURÍA
Existen 6 categorías universales de virtudes: sabiduría, valor, humanidad, justicia, templanza y trascendencia. Ningún ser humano es «bueno para nada». Todos poseemos las 24 virtudes en diferente medida. Escucha con atención y analízate para que te des cuenta lo maravilloso (a) que eres y cuánto tienes para aportar a esta sociedad y a tus seres queridos.
Hoy vamos a entrar en profundidad en la primera virtud, la sabiduría.
La sabiduría se considera como la virtud principal de donde emanan todas las demás. Dentro de la virtud de la sabiduría encontramos cinco virtudes de carácter:
1. Creatividad: La creatividad es una fortaleza cuando se nos ocurren ideas que dan como resultado algo de valor. Somos creativos cuando pensamos en formas nuevas y productivas de realizar proyectos o alcanzar metas, formas que pueden ser artísticas pero no necesariamente. La creatividad es pensar en nuevas formas de hacer las cosas. Implica producir ideas o comportamientos originales. Sin embargo, la originalidad no basta: todo lo que se crea, ya sea una idea o un producto, también debe ser útil o adaptable.
Hay dos componentes esenciales para la creatividad: originalidad y adaptabilidad. Si la creatividad es nuestra fortaleza, generamos ideas o comportamientos que son novedosos o inusuales y estos hacen una contribución positiva a nuestra vida o la vida de otros.
La creatividad nos ayuda a pensar en varias formas de resolver un problema, a sentirnos cómodos en las diferentes situaciones de la vida y a adaptarnos a los desafíos y factores estresantes.
2. Curiosidad: La curiosidad es una de nuestras virtudes cuando nos interesamos por cada momento que vivimos; encontramos fascinación; exploramos y descubrimos nuestro entorno. Ser curioso es explorar y descubrir. La curiosidad se describe a menudo como la búsqueda de novedades y el estar abiertos a nuevas experiencias, y está asociada con el deseo natural de generar conocimiento.
Para las personas curiosas hay dos componentes clave: están interesadas en explorar nuevas ideas, actividades y experiencias, y también tienen un fuerte deseo de aumentar su conocimiento personal. La curiosidad es una de las 5 virtudes más vinculadas con la satisfacción con la vida. La curiosidad también se asocia con la felicidad, la salud, la longevidad y las relaciones sociales positivas.
3. Amor por aprender: El amor por aprender es una de nuestras virtudes cuando nos motiva adquirir nuevos niveles de conocimiento o profundizar en nuestros conocimientos o habilidades existentes de una manera significativa. El amor por aprender significa tener pasión por aprender, un deseo de aprender solo con el fin de aprender.
De hecho, la curiosidad y el amor por el aprendizaje se encuentran entre las virtudes más estrechamente relacionadas. Sin embargo, son diferentes. La curiosidad es la fuerza motivadora que nos lleva a buscar nueva información. El amor por aprender es el deseo de profundizar en esa información. La persona curiosa está motivada por la búsqueda del conocimiento; la persona que ama aprender está motivada por la expansión de sus conocimientos.
El amor por aprender describe la forma en que una persona utiliza nueva información y habilidades. Nos ayuda a perseverar en medio de los desafíos. El amor por el aprendizaje nos conduce al desarrollo de una base de conocimientos más profunda, lo que mejora la competencia y la eficacia. El amor por el aprendizaje también se ha asociado con un envejecimiento saludable y productivo.
4. Mente abierta: Tener la mente abierta es una de nuestras virtudes cuando nos tomamos el tiempo para analizar nuestra vida y sus aspectos con minuciosidad y la examinamos desde varios puntos de vista; no sacamos conclusiones prematuras; podemos cambiar de opinión al ver otros aspectos que no habíamos visto antes; sopesamos las evidencias de forma justa.
Tenemos una mente abierta cuando consideramos todos los aspectos objetivamente al tomar decisiones, incluidos los argumentos que están en conflicto con nuestras convicciones. Esto implica tomar decisiones racionales y lógicas y evaluar analíticamente las ideas, opiniones y hechos. La mente abierta no se deja llevar por los puntos de vista actuales ni favorece las ideas dominantes.
La mente abierta tiene busca activamente pruebas en contra de sus propias creencias, planes u objetivos favoritos y las sopesa todas de manera justa. Las personas que pueden ver las cosas desde más de una perspectiva son particularmente hábiles para lidiar con tiempos de cambio y transición.
5. Perspectiva: La perspectiva es una de nuestras virtudes cuando somos capaces de dar consejos sabios a otros porque vemos y comprendemos el mundo que nos rodea. Tenemos perspectiva cuando damos consejos a los demás considerando perspectivas diferentes (y relevantes) y utilizando nuestras propias experiencias y conocimientos para tener un claro panorama general.
Tener perspectiva es poder ver el bosque y también los árboles. Cuando escuchamos a otros, la perspectiva nos ayuda a pensar también en las lecciones de la vida, la conducta adecuada y lo que es mejor para la situación que estamos discutiendo. Esta capacidad de pensar en términos generales nos ayuda a ofrecer buenos consejos.
La perspectiva nos permite aprender de los errores y de las virtudes de los demás. Pero la perspectiva es distinta de la inteligencia en que requiere un alto nivel de conocimiento, tener capacidad de dar consejos y de tener en cuenta muchas cosas antes de tomar decisiones o dar un consejo.
PONIÉNDOLO EN PRÁCTICA
Se recomienda que tomemos una de las virtudes que hayamos identificado en nosotros y, durante una semana, la usemos de una manera nueva cada día. Aquí les damos algunos consejos:
Creatividad
* Inscribirnos en una clase de cerámica, fotografía, escultura, dibujo o pintura.
* Elegir un objeto en nuestro hogar y darle un uso diferente del que tenía.
* Enviar una tarjeta a un amigo que incluya un poema que hayamos escrito.
* Pensar en uno de nuestros problemas y buscarle dos posibles soluciones.
* Presentar a alguien las soluciones de forma no verbal, como un acto o mímica.
* Convertir un objeto inanimado en algo significativo.
Curiosidad
* Asistir a una conferencia sobre un tema del que no sabemos nada.
* Preparar un comida que nunca hemos preparado.
* Descubrir un lugar nuevo en nuestra ciudad y aprender sobre su historia.
* Tomar una ruta diferente a casa.
Amor por aprender
* Si eres estudiante, leer algo que sea «recomendado» pero no «obligatorio».
* Aprender y usar una nueva palabra todos los días.
* Leer un libro que no sea de ficción.
* Leer algunas de las obras originales de Gandhi o algún otro pensador.
* Buscar en Internet un tema de interés y descubrir algo nuevo sobre el mismo.
Mente abierta
* Hacer de «abogado del diablo» en una conversación, y adoptar una posición contraria a tu opinión.
* Considerar alguna opinión fuerte y pensar en qué podrías estar equivocado.
* Escuchar un programa de radio o leer un periódico que defiende la línea política opuesta.
* Hacer una o dos preguntas aclaratorias a alguien que tenga un enfoque de vida diferente o creencias diferentes a las tuyas.
Perspectiva
* Pensar en la persona más sabia que conoces y tratar de vivir un día como si fueras esa persona.
* Ofrecer consejos solo si te lo piden, pero hacerlo con la mayor atención posible.
* Resolver una disputa entre dos amigos, familiares o compañeros de trabajo.
* Escuchar atentamente y compartir luego tus ideas y pensamientos.
CONCLUSIÓN
Las virtudes del carácter son las partes positivas de nuestra personalidad, las que afectan nuestra forma de pensar, sentir y comportarnos. Conocer y aplicar las más sobresalientes virtudes de nuestro carácter es la clave para que seamos la mejor versión de nosotros mismos. TODOS poseemos virtudes de carácter en diferentes grados, lo que le da a cada persona un perfil de virtudes completamente único. ¡Eres único e importante!
Te recomendamos que tomes una de tus virtudes distintivas que hayas identificado y durante una semana la uses de una manera nueva cada día. Dios te hizo único para que brilles allí donde estás.