Continuando con la serie de programas sobre los hábitos y las disciplinas que podemos desarrollar para tener una vida productiva, basados en «Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva» de Stephen R. Covey, hoy vamos a hablar del Hábito #6: La sinergia y la cooperación creativa.
Cuando valoramos nuestras diferencias y trabajamos en equipo, maximizamos nuestros esfuerzos creadores, tenemos relaciones más fuertes y vidas más exitosas y eficaces. Escuchen lo que dijo el Presidente George Bush en su mensaje inaugural: «Tomo como guía lo que esperaba un santo: en las cosas esenciales: unidad, en las cosas importantes: diversidad, en todas las cosas: generosidad».
Simplemente hablando, sinergia significa que el todo es más que la suma de sus partes. Por ejemplo: si pegamos dos trozos de madera, van a sostener un peso mucho mayor que la suma de los pesos que cada trozo sostiene por separado.
La esencia de esta sinergia y cooperación creativa radica en valorar y respetar las diferencias, compensar las debilidades y construir sobre las fortalezas. El desafío está en que apliquemos los principios de cooperación, trabajo en equipo y creatividad en nuestras interacciones. Y nuestra vida diaria proporciona muchas oportunidades para poner todo esto en práctica.
Ejemplo: Muchas veces sucede que en una reunión, en una clase, en un taller o en un grupo de estudio, alguien hace una pregunta sobre algo personal y al principio nadie se atreve contestarla. Pero en cuanto una persona habla, una a una las otras personas también comienzan a hacerlo. ¿Por qué sucede esto? Porque cuando uno es auténtico y está dispuesto a compartir sus experiencias personales e incluso las dudas que tiene sobre sí mismo, las otras personas pueden relacionarse e identificarse y sentirse más seguras para expresarse.
Entonces, cuando al comunicarnos buscamos la cooperación creativa, abrimos nuestra mente, nuestro corazón y nuestras expresiones a posibilidades, alternativas y opciones nuevas. Nos abrimos a la influencia de la otra persona y generamos nuevas opciones.
Ejemplo: En época de vacaciones, un hombre quiere llevar a su familia al lago para vivir en la naturaleza y pescar. Se trata de algo importante para él; lo ha estado planificando durante todo el año. Ha alquilado una cabaña y un bote; los hijos están realmente entusiasmados. Pero la esposa quería aprovechas las vacaciones para visitar a su madre enferma que vive a doscientos cincuenta kilómetros de distancia. No tiene oportunidades frecuentes de verla, lo cual es importante para ella. Estas diferencias pueden ser causa de una importante experiencia negativa.
«Ya hicimos los planes. Los chicos están entusiasmados. Deberíamos ir al lago», dice el marido.
«No sabemos cuánto tiempo más vamos a tener a mamá con nosotros, y quiero estar con ella», contesta la esposa. «Si no vamos ahora, ¿cuándo volveremos a tener tiempo para hacerlo?»
«Todo el año hemos estado esperando esta semana de vacaciones. Los chicos no van a estar contentos pasando una semana en casa de la abuela. Nos van a volver locos. Además, tu madre no está tan enferma. Y tu hermana, que vive a menos de un kilómetro de ella, puede encargarse de cuidarla.»
«Es mi madre también. Quiero estar con ella.»
«Puedes hablarle por teléfono todas las noches. Y ya vamos a encontrarnos en la reunión familiar de Navidad, ¿recuerdas?»
«Para eso faltan cinco meses. Ni siquiera sé si para entonces aún estará viva. Además, me necesita y quiere que esté con ella.»
«La están cuidando perfectamente. Y los chicos y yo también te necesitamos.»
«Mi madre es más importante que pescar.»
«Tu esposo y tus hijos son más importantes que tu madre.»
Como no están de acuerdo, durante esas idas y venidas finalmente puede surgir algún tipo de transacción.
• Tal vez decidan tomarse vacaciones separadas: el hombre se va con los hijos al lago la mujer visita a la madre. Los dos se sentirán culpables y desdichados. Los hijos lo sentirán, y no podrán disfrutar plenamente de las vacaciones.
• También es posible que el esposo acceda al deseo de su mujer, pero lo hará de mala gana. Y, consciente o inconscientemente, producirá pruebas de que se está cumpliendo su profecía de que todos se sentirán mal durante esa semana de vacaciones.
• Si es la esposa la que cede, se encerrará en sí misma y se mostrará sumamente sensible a cualquier novedad respecto del estado de su madre. Si ésta llegara a morir, tal vez el esposo nunca se perdonará haber insistido, y la mujer tampoco se lo perdonará a él.
Sea cual fuere la transacción a la que finalmente lleguen, puede que a lo largo de los años la recuerden como prueba de insensibilidad, indiferencia o falta de consideración. Podría constituir una fuente de disputa por mucho tiempo, e incluso dividir a la familia. Muchos matrimonios alguna vez perfectos, apacibles, espontáneos y afectuosos se han deteriorado hasta llegar a la hostilidad por causa de incidentes de este tipo. El esposo y la esposa ven la situación de modo diferente. Y esa diferencia puede dividirlos, separarlos, introducir malentendidos en la relación… O bien acercarlos en un nivel más alto…
Si han cultivado los hábitos de la interdependencia efectiva, podrían afrontar sus diferencias de una forma totalmente distinta. Al buscar un camino superior, esposo y esposa comprenden que su amor, su relación, forma parte de su sinergia. El esposo siente real y profundamente el deseo de su mujer, la necesidad que ella tiene de estar con su madre. Comprende que quiere aliviar las obligaciones de la hermana, que es la principal responsable del cuidado de la enferma, y que realmente no saben por cuánto tiempo más la mamá estará con ellos, lo que sin duda es más importante que ir a pescar.
Por su parte, la esposa comprende profundamente el deseo del esposo de que toda su familia esté junta y de procurarles a los niños una gran experiencia. Tiene presente la inversión realizada en lecciones y equipos de pesca para esas vacaciones y la importancia de crear juntos buenos recuerdos. Entonces, en vez de ponerse cada uno de un lado del problema, reúnen todos esos deseos y lo examinan desde la misma óptica, comprendiendo las necesidades mutuas y creando una tercera alternativa que los satisfaga. El esposo dice:
«Tal vez podamos pensar en otro momento de este mes para que visites a tu madre. Yo podría hacerme cargo de la casa durante el fin de semana y después conseguir que alguien me ayudara de manera que tú puedas ir. Sé que para ti es importante.»
«O podríamos instalarnos y pescar en un lugar que esté cerca de la casa de mi madre. No sería tan bonito, pero de todos modos haríamos vida al aire libre y también satisfaríamos otras necesidades. Y los chicos no se subirían por las paredes. Incluso podríamos planear actividades con los primos y tíos, lo cual sería una ventaja adicional», sugiere la esposa.
En otras palabras: sinergizan. Se comunican en ambas direcciones hasta que aparece una solución con la que ambos se sienten bien, y que es mejor que cualquiera de las propuestas originales. Ya no se trata de una transacción sino de una transformación. Las dos partes consiguen lo que realmente quieren, y en el proceso construyen la relación. ¿Por qué es esto posible? Porque:
* Como sus necesidades emocionales están satisfechas, en su matrimonio existe la confianza y la comunicación abierta.
* Como tienen la mentalidad de que ambos salgan ganando, creen en una tercera alternativa, en una solución mutuamente beneficiosa, preferible a todas las propuestas en principio.
* Como escuchan empáticamente y procuran primero comprender, crean dentro de sí y entre ellos un cuadro amplio de los valores y preocupaciones que hay que tener en cuenta para tomar una decisión.
* Y la combinación de esos ingredientes crea un ambiente ideal para la cooperación creativa.
* Haz una lista de las personas que te irritan. ¿Representan ellas diferentes concepciones que podrían conducir a la sinergia si tú tuvieras una mayor seguridad y valoraras más las diferencias?
* La próxima vez que estés en desacuerdo o te enfrentes con alguien, trata de comprender sus preocupaciones y orienta esas preocupaciones de un modo creativo para que sea mutuamente beneficioso.
Hoy hablamos del Hábito #6: La sinergia y la cooperación creativa, que dice que cuando valoramos nuestras diferencias y trabajamos en equipo, maximizamos nuestros esfuerzos creadores, tenemos relaciones más fuertes y vidas más exitosas y eficaces.
La semana que viene trataremos el último hábito de esta serie. ¡No te lo pierdas!