Tesoros en el cielo
En esta vida podemos acumular muchos y muy grandes tesoros como bienes, riquezas, títulos de honor, poder e influencia. Pero todos ellos son pasajeros: cuando nos llegue la muerte, ellos morirán con nosotros. Es por ello que Jesús nos aconseja:
«No almacenes tesoros aquí en la tierra, donde las polillas se los comen y el óxido los destruye,
y donde los ladrones entran y roban. Almacena tus tesoros en el cielo, donde las
polillas y el óxido no pueden destruir, y los ladrones no entran a robar.» Mateo 6:20 NTV
Contrario a lo que el mundo enseña, Jesús nos dice que los verdaderos tesoros son los que acumulamos en el cielo, los tesoros espirituales eternos que jamás perderemos si perseveramos hasta el fin. ¿Qué te parece si este año te propones aprender y aplicar más a tu vida la Palabra de Dios, o enseñar más a tus hijos, hermanos o amigos, la voluntad de Dios para sus vidas?